Le apuntó en la cabeza a un anciano, le robó la moto y ahora fue condenado
El 9 de septiembre del 2022, a las 19:00 horas, mientras un hombre mayor se encontraba en la vereda de su casa, en calle Suipacha al 1800, saliendo con su motocicleta Honda Pop 100, Braian Alberto Ramayo (26), junto a otros cuatro sujetos no identificados, se acercó a él, sacó un arma de fuego y le apuntó en la cabeza exigiéndole que les entregara el rodado. La víctima arrojó al piso su moto y salió corriendo, apoderándose de la misma el imputado y sus consortes.
La nuera del damnificado rápidamente llamó al sistema de emergencias 911. Los efectivos policiales hicieron recorridos por la zona y vieron a Ramayo cuando intentaba entrar a su domicilio, en Alejandro Heredia al 1600, con la motocicleta sustraída. En ese momento, se procedió a su aprehensión y traslado a la Comisaría Sexta, junto a la motocicleta. El arma utilizada no fue encontrada.
Condena
Este jueves se llevó a cabo una audiencia convocada por el Ministerio Público Fiscal a los fines de tratar una propuesta de juicio abreviado convenida con la defensa del acusado y la víctima, un hombre de 77 años. Siguiendo expresas instrucciones de Ernesto Salas López, titular de la Unidad Fiscal de Delitos Flagrantes II, la auxiliar de fiscal Cyntia Bono narró cómo sucedió el ilícito y enumeró las pruebas reunidas para probarlo. Luego de que el imputado reconociera su participación delictiva, la representante de la Fiscalía precisó que la calificación penal es como coautor de robo doblemente agravado por haber sido cometido con arma de fuego cuya aptitud para el disparo no puede tenerse de ningún modo por acreditada y en poblado y en banda, en grado de tentativa.
En ese sentido, las partes pactaron que se le imponga a Ramayo la pena dos años de prisión de cumplimiento condicional y reglas conducta por el plazo que dura la condena: prohibición de portar armas de fuego; prohibición de acercamiento tanto hacia la víctima como a su grupo familiar en un radio de 200 metros; y abstenerse de realizar hacia la víctima cualquier acto de perturbación, turbación, hostigamiento o intimidación. Al finalizar, tras un cuarto intermedio, la jueza actuante decidió declarar admisible el acuerdo pleno de juicio abreviado.