¿Qué se debe tener en cuenta al usar repelente?
En este sentido Molina comentó que generalmente los repelentes que se encuentran en el mercado tienen en su composición derivados piretroides y que con ellos se debe tener precaución de que no dañen la piel.
«Por eso hay que analizar las presentaciones o las formas farmacéuticas. En los que son compuestos de citronela y o derivados, hay otras combinaciones de algunas empresas que pueden tener sustancias tóxicas irritantes como ser derivados de alcohol o de ciertos compuestos que pueden causar irritaciones, por eso siempre también hay que tener la precaución sobre a quién le vamos a indicar el repelente», dijo la profesional y aclaró que si el paciente es un niño lactante o un adulto hace que el criterio varíe mucho.
En el caso de los lactantes muchas veces se prefieren vehículos hipoalergénicos como las emulsiones compuestas por derivados naturales y en primera infancia y adultez se indican más los que frecuentemente se pueden encontrar en el mercado. «La mayor precaución está en adaptar la forma farmacéutica a la edad del paciente y las características de su piel. Hay que tratar de realizar la consulta con algún especialista para que este indique la forma adecuada y que los repelentes se empleen tanto al amanecer como en el atardecer, horarios en los que habitualmente los insectos suelen provocar picaduras», advirtió.
En pacientes con pruritos agudos y rebeldes es fundamental no colocar constantemente repelente, sino solo y puntualmente en los horarios adecuados. En el caso de los niños se debe priorizar sprays y su uso a una distancia de unos 15 cm del cuerpo para evitar el ingreso de sustancias externas en ojos o boca.